La Estrella de Panamá. 28 de septiembre de 2009
NEIR CARRASCO/ RAÚL LÓPEZ
periodistas@laestrella.com.pa
REUNIÓN DEL PRD EN CHIRIQUÍ
Los dirigentes de la provincia exigieron ser escuchados. Aseguran que mientras no depongan sus cargos la unidad será “cosmética”
Los pasos hacia la reunificación del PRD tuvieron algunos traspiés ayer, durante la convocatoria del partido en la provincia de Chiriquí.
Desde tempranas horas de la mañana dirigentes del partido se dieron cita en la Casa de Cultura en David, pero al parecer la invitación no llegó a todos los dirigentes de la provincia. “Muchos de los que asistieron se enteraron por oído y por eso fueron. El CEN sólo invitó a algunos”, dijo uno de los presentes.
Las bases molestas llegaron al lugar de la reunión exigiendo ser escuchados. Esta situación provocó cambios en el programa de la reunión, que inicialmente contemplaba espacios para algunos dirigentes provinciales, miembros del CEN y del ex presidente de la República, Ernesto Pérez Balladares.
Y así fue. De treinta personas que expusieron sus planteamientos a la cúpula del partido, veintiocho pidieron la renuncia del CEN. “Levanten la mano los que están de acuerdo con que el CEN debe renunciar...”, decía uno, mientras el salón entero alzaba la mano en señal de aprobación. Si tienen que bajarse háganlo y “den chance” a otros. Basta ya de manipulación, dijo Dani Miranda, uno de los que hizo uso de la palabra.
También hubo cuestionamientos contra la administración del ex presidente Martín Torrijos, señalando que estuvo “lejos de los principios torrijistas”. “La unidad empieza con la renuncia del CEN para que haya nuevamente confianza en las bases”, repetía otro que cuestionaba a la dirigencia del partido por “postegar la salida inminente” del CEN.
Los disidentes pidieron además que se respeten los acuerdos alcanzados en el Directorio Nacional realizado a finales de junio en Santiago. “No se habló de fechas, de nada. Y esto es lo importante, hay que ponerle fecha ya al Directorio”, aseguró uno de los quejosos agregando que por ahora es sólo una unidad “cosmética”, ya que la verdadera unidad se construye en las bases del partido día a día.
En ese sentido, el secretario general del partido, Martín Torrijos, un poco molesto, ripostó a los cuestionamientos de las bases asegurando que “el verdadero enemigo está fuera del PRD y no dentro”. “Salgamos de aquí más que con fechas con voluntad, y esto no quiere decir que nos perpetuaremos”, dijo el ex mandatario que propuso un “repliegue táctico” para que se hagan las renovaciones en el partido, pero de la manera menos “traumática”.
BUSCANDO LA UNIDAD
En ese escenario Juan Carlos Navarro, primer subsecretario del CEN, solicitó a sus compañeros en la dirigencia del partido que a más tardar en esta semana se ponga fecha de cumpleaños para la celebración del Directorio Nacional y Congreso Extraordinario “Si este partido no se unifica, no habrá una voz fuerte de oposición al actual gobierno”, agregó Navarro pidiendo a cada uno de los dirigentes del PRD, poner una “cuota de sacrificio” para conseguir la unidad. “Se va a trabajar con mayor confianza y las bases entenderán que su voz ha sido escuchada”, sostuvo.
El dirigente opositor aprovechó la oportunidad para cuestionar al gobierno de turno. “Destruir al PRD es el objetivo de Martinelli y su gobierno, que además está destruyendo la fábrica social de Panamá”.
Por su parte, la presidenta del PRD, Balbina Herrera, quien también lanzó dardos envenenados contra la administración Martinelli, “Belgis Castro está preso por las contrataciones directas que hizo por urgencia para atender el caso de fibra de vidrio, pero la ministra de Educación, en su corto período, lleva cinco millones de dólares en contrataciones directas, de los cuales medio millón de dólares son para renovar el despacho superior”, indicó la ex candidata presidencial.
Herrera manifestó que la unidad del partido no se decreta, sino que se construye respetando a todos y agregó que todo el que quiera revalidar su cargo que salga a buscar los votos. “Este es un partido democrático”, acotó.
Mientras tanto el ex presidente, Pérez Balladares, denunció “la clara intención del Órgano Ejecutivo de intervenir en los otros poderes del Estado”. Aseguró que es falso que se haya hecho una unidad “cupular” para repartirse el CEN y agregó que no es bueno estarse tirando la culpa unos a otros
Los líderes del partido abogaron por su copartidario Belgis Castro, asegurando que su detención es “injusta”.
Para lograr la unidad todos tenemos que poner una cuota de sacrificio, sólo así nos reunificaremos”
JUAN CARLOS NAVARRO
PRIMER SIBSECRETARIO DEL CEN
INCIDENCIAS
El primero en llegar al encuentro fue Navarro, luego Balladares, posteriormente Herrera, y por último Torrijos.
Durante la reunión, los dirigentes de bases solicitaron la expulsión de Giselle de Calcagno y solicitaron a la dirigencia el apoyo para Belgis Castro.
En el encuentro también se hicieron presentes otras figuras del PRD, como Héctor Alemán, Benjamín Colamarco, quien se presentó con un nuevo look; los ex presidentes de la Asamblea Nacional, Pedro Miguel González y Raúl Rodríguez; al igual que los diputados Leandro Ávila y Denis Arce, además Francisco Sánchez, Cárdenas y Priscila Valenzuela, entre otros.
lunes, 28 de septiembre de 2009
sábado, 5 de septiembre de 2009
Es momento de decir adiós
La Prensa. 5 de septiembre de 2009.
OPINION
Por: Dr. Joaquín Perurena D.
Asumir las culpas
El PRD paga hoy la miopía histórica de haber entregado el partido a un secretario general que desconocía su historia, su fundamento ideológico, su adhesión a la Internacional Socialista y la vocación socialdemócrata que fue la génesis de su fundación. La aventura nos ha salido cara. Martín Torrijos trabajó para la oligarquía que en su momento su padre desplazó por corrupta y le sirvió sin chistar.
En un solo período se alejó de todo grupo que significaba la plataforma del partido: el pobre, el estudiante, el campesino, el indígena, la clase media que paga impuestos exorbitantes, los obreros, el universitario y los intelectuales. Aún así no se da por enterado, y no entiende, o no le importa, el futuro del partido.
Por supuesto que carece de la gallardía para enfrentar la derrota del 3 de mayo y asumir la responsabilidad por la misma. Si así lo hiciera, se detendría la fiesta de nuestros adversarios que ven en el inexacto actuar de nuestro secretario general la oportunidad para destruir al colectivo definitivamente.
Más de 500 mil panameños votamos por el PRD. Gente que entendió que un matrimonio entre Cambio Democrático y los arnulfistas, fraguado en la embajada de EU, no podía ser bueno. Gente que entendió que, los avances sociales del torrijismo, hoy opacados por las nubes de dudas que sobrevuelan a Martín, podrían peligrar. Gente que entendió que, aún ante oídos sordos del secretario general, inaccesible en su condición de Presidente de la República, vimos el futuro con “luces largas” y apoyamos al partido.
La membresía ha perdido la confianza. Y sin confianza no hay nada. Por eso este momento es tan importante. Dilatar las decisiones sólo nos llevan a un barranco de mayor profundidad. Martín Torrijos debe renunciar a la Secretaría General. Debe asumir la derrota, despojarse de toda inmunidad y enfrentar, desde una condición de ciudadano, no de secretario general, no de diputado del Parlacen, lo que le venga. Sólo así daría paso a la posibilidad del partido de concebir una nueva ruta, de airear el ambiente y de hacer una oposición de cara a la derecha fundamentalista que actualmente ocupa el Palacio de las Garzas.
Entiendo que esto es mucho pedir. Entiendo que otros ya se lo han dicho. La historia pocas veces ofrece salir por la puerta ancha como en esta ocasión se le presenta a Torrijos Espino. Se lo debe a su apellido, se lo debe al país y, sobre todo, se lo debe al PRD.
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