Perdedores y ganadores

El Panamá América. 8 de mayo de 2009. Pagina 14

RESULTADO ELECTORAL
Rafael Montes
DIRECTOR DEL BLOG POLITICO

Contrario a lo que algunos han expresado, necesariamente sí hubo perdedores y ganadores. La gran perdedora: Balbina Herrera, la equivocada abanderada del PRD. Hay momentos en que uno muestra hidalguía ante la adversidad, pero se hace con humildad, decoro y sabiduría. La candidata demostró una vez más de lo que está hecha; fue más perdedora en la medida en que ofreció a la nación un discurso incoherente, en el que no reconoció un ápice el triunfo de la fórmula ganadora de Martinelli. Como dijera un propio perredé: “¡Qué falta de todo!”.

Bobby Velásquez, mimado de palacio, fue otro de los arrastrados por la poderosa corriente del tsunami electoral del pueblo. El otrora bastión del PRD fue perdido -tal vez para siempre-, a causa de un manejo poco transparente que trajo consigo falta de credibilidad en el candidato y su propuesta -léase Murcia-. Tal vez, hubiese sido distinto de haber aceptado desde un inicio que sí se reunió con el tipo de la maleta. Indistintamente recibió adelantada en vindicta pública la sanción del pueblo panameño, antes del juicio en derecho.

Los grandes ganadores son Ricardo Martinelli y el pueblo panameño. Se fortalece la gestión del Presidente al recibir un claro mandato del pueblo, acompañando la decisión con una amplia capacidad de toma de decisiones al tener la Alianza el control total de la Asamblea Nacional. Habiendo trabajado en los planes de gobierno, sé que no se trata ahora de inventar la rueda, sino de gerenciar y ejecutar con transparencia el mandato del electorado.

El panameñísimo Bosco Vallarino tiene kilos de gran campeón al arrasar contra todo pronóstico, la Alcaldía de la ciudad capital. No obstante, sin lugar a dudas, el gran ganador de todo el proceso electoral lo es Juan Carlos Varela Rodríguez, quien en todo momento demostró su valentía, sabiduría, capacidad, vocación de servicio y amor a la patria. Aún en el último mes quinta columnistas trabajaban arduamente por hacerlo ver mal y nunca les importó con el desenlace electoral, con las correspondientes consecuencias para con el partido. Pese a ello, Dios confirmó una vez más que Varela es el líder indiscutible del Partido Panameñista. Nada ni nadie le pueden socavar o escatimar su liderazgo bien ganado con más de un 30% del caudal electoral y una mayoría de diputados panameñistas.

“Vox Populi Vox Dei”.